Se sacó la rabia

El partido de anoche tenía muchos condimentos. Los azules querían dar vuelta la página y empezar a olvidar, y hacer olvidar, la derrota del Domingo frente al archirrival. Por su parte los peruanos pensaban en mantener su racha de local, además que siempre un enfrentamiento contra chilenos es más importante que cualquier otro.

Así salían ambos equipos a la cancha del Estadio "Alejandro Villanueva", no había favorito pero el rendimiento de local de Alianza sumado a la derrota en el clásico de los dirigidos por Pelusso inclinaba un poco la balanza para el lado local.

Los primeros minutos sorprendieron con una "U" muy lanzada al ataque y conteniendo de gran forma a los peruanos, eso sí fueron pocas las jugadas que lograron inquietar al portero peruano.

En ese ritmo se recorrió el primer tiempo, buen juego chileno conteniendo al rival pero poca claridad en los últimos metros. Alianza se sorprendía siendo superada en la cancha.

La segunda etapa marcó un cambio en el juego, los locales adelantaron las líneas, empezaron a presionar a la visita en su campo y lograron cambiar el ritmo de partido comenzando a tener ellos el control del balón. Aunque el buen juego de la línea posterior azul contenía de gran manera los embates de los limeños, además de un Pinto que sigue a un gran nivel.

Iban 85' y el 0-0 parecía un buen negocio para la "U", por como se daba el partido y por estar de visita. Pero un pelotazo largo, que parecía sin destino, de José Rojas encontraría a Rivarola con los dos centrales peruanos, error de los zagueros en el salto que termina dejando mano a mano a Gokú con el portero, definición fuerte del "7" argentino y a cobrar. 1-0 para los chilenos, triunfo de oro y el sueño de los cuartos de final aún más cerca para los dirigidos por Gerardo Pelusso.

El gol:

Se puede decir que el equipo nacional sacó este partido como grande, fue un triunfo trabajado y con un orden táctico casi perfecto.

Sirve también para empezar a lavar heridas, recuperar la confianza y demostrar que lo del Domingo pasado solo fue un traspié, aunque muy doloroso.

El próximo Jueves es el partido de vuelta de estos octavos de final, no se sabe donde pero se barajan dos posibilidades: Monumental o Santa Laura. Lo único que es seguro es qué el estadio que sea va a estar atiborrado de gente, es que el pueblo azul sueña, y con todo derecho. Hay que ir paso a paso, algo que el plantel y Pelusso deben tener claro.