Logo del Fair Play
En el deporte en general existe una expresión conocida como Fair Play que se creo con el fin de hacer del juego simplemente eso, un juego leal y fraterno.
Específicamente en el fútbol el juego limpio es la bandera de lucha de la FIFA para poder limpiarlo de actos que vayan en contra de el principal fin de este deporte que es entretenerse, competir y hacer espectáculo.
¿Cuál es el problema entonces?
Con el paso de los años el Fair Play se ha ido ensuciando, cada vez es más manoseado y son los mismos jugadores quienes han transformado de éste en una forma de poder lograr resultados y beneficios, aunque aún existen quienes lo respetan.
El problema nace en el pensamiento de algunos que, mientras se logre el triunfo no importa la forma, es por eso que muchas veces quedarse en el piso cuando no pasa nada, con el fin de ganar tiempo, es una de las formas más comunes de ensuciar el juego limpio. Los mentirosos en el deporte abundan y están llevando que el famoso Fair Play deje de ser el principal argumento para mantener la esencia del juego.
Incluso en algunas ligas se ha buscado fomentar el juego limpio creando un premio al final de cada torneo al equipo que haya resultado con menos amonestaciones en la suma de partidos, pero al parecer la idea no ha servido de mucho.
Existen algunos que ya se cansaron de la suciedad que rodea a esta gran iniciativa y han decidido simplemente sacar la expresión de la idea de juega que profesan, un ejemplo es Marco Antonio Figueroa entrenador de Universidad Católica quien ha dicho de todas las formas y a los cuatro vientos que su equipo no va a respetar el Fair Play, entiéndase tirar la pelota afuera cuando un rival esté en el suelo, debido a que muchos usan esa expresión del juego para sacar provecho de sus propios objetivos. Puede sonar feo o de mal gusto la idea de Figueroa pero es una clara demostración de como se ve el Fair Play hoy en día en el fútbol.
El adiestrador de Católica justifica su pensamiento aludiendo a que es el arbitro el encargado de discernir si un jugador necesita o no asistencia médica, el problema está en que ¿Cuál es la posibilidad de un arbitro de saber, en milésimas de segundo, si un jugador finge o de verdad tiene dolor? El tema no es fácil.
El problema principal radica en los jugadores, y es que la salida a la cancha con la bandera amarilla que representa el juego limpio ha pasado a ser simplemente parte del protocolo que exige la FIFA y no significa nada más, y a la hora de iniciar el juego se olvida todo respeto hacia el rival.
La discusión está ahí, abierta. ¿Hasta donde es válido el Fair Play?
Carlitos, antes que todo, te felicito por el blog. Está realmente bueno. Por otra parte, es una buena herramienta para que retomemos contacto.
ResponderEliminarSobre esta nota que puedo opinar... creo que el Fair Play trata de ser un reflejo perfecto de los buenos modales llevados a una cancha de fútbol. Enviar la pelota afuera de la cancha para que atiendan a un jugador, no simular, etc. Vendrían siendo analogamente pedir permiso para pasar, dar las gracias o no caminar por el lado izquierdo en las escaleras de un mall o metro.
Aplicar las buenas costumbres a una cancha es lo correcto. Hay que ser ciego para no darse cuenta el enfasis que ha puesto la FIFA para dar a conocer esta disciplina (musica caracteristica, bandera, etc). En otras partes, sí da resultados, pero con excepciones.
Marco Antonio Figueroa? una verguenza, es un tipo que no pide permiso no da las gracias y seguro que camina en las escaleras en el carril izquierdo... bah seguro que tiene auto, asi que adelante por el carril derecho. Este tipo es un mal educado; y sabes por qué tiene esta actitud? solamente para ser mediático, para figurar porque no ha ganado absolutamente nada, solo despotrica.
Yo siempre he sido partidario y defensor incondicional del Fair Play, el problema y no lo niego es que tal vez muchos piensan igual pero cuando le vienen hacer trampa... haciendo tiempo, fingiendo lesiones, etc... hace que a uno se le olviden sus principios.
ResponderEliminarYa que debemos pensar que a los jugadores profesionales entran a 1000 revoluciones a un partido, y yo creo que todos cuando juegan su pichanguita por alguna copa u otro le gusta dejar todo en la cancha... y ver que este esfuerzo se vea mermado por el juego sucio d emuchos (no algunos) provoca que se contamine este hermoso deporte.
Para terminar dejo la frase que he escuchado muchas veces:
"El fútbol no es un deporte de caballeros"
Hola carlos, soy el Cristian Pereira. Te felicito por el blog, muy bueno.
ResponderEliminarEn cuanto al fair play, me parece que, como muchas instituciones, falta que sean realmente eficaces. Pareciera ser que hay que crear mejores mecanismos que aseguren el cumplimiento de lo que en esencia es el Fair Play. Bien podria realizarse implementando comisiones fiscalizadoras o sancionatorias.
Tanto los clubes como la fifa deberian verse obligados a aplicar la normativa bajo algun apremio que impida el incumplimiento o la mala praxis. Quizas ya existen, pero al parecer no se aplica con la rigurosidad que el tema implica.
Saludos