Universidad de Chile logró ayer el triunfo más importante de toda su historia. Es que los azules jamás habían logrado un triunfo en tierras cariocas, y tenían una pequeña cantidad de empates. Por eso el 2-3 de anoche en el Maracaná, frente al último campeón de Brasil y por los cuartos de final de la Copa Libertadores no merece un menor apelativo que el de histórico.
Desde el primer minuto el equipo de Pelusso salió con la ambición propia de un plantel que quiere lograr algo, adelantando líneas, presionando en campo rival y con jugadores enchufadísimos como Walter Montillo, Álvaro Fernández, Iturra y Seymour, los cuatro del medio lograron con garra y fútbol llevar el juego a su ritmo.
Por eso no llamó la atención cuando Mauricio Victorino pescó un rebote en el área y sin asco lo mandó al fondo de las mallas de Bruno, 4' y la sorpresa se hacía presente ante más de 70mil personas. El cuadro laico siguió machando y a los 24' encontró nuevamente premio a eso, cabezazo de Olarra y los azules se ponían 0-2, épico.
Los últimos 15 minutos de la primera etapa empezaron a pasarle la cuenta, físicamente a los chilenos que habían corrido como nunca, por eso las líneas estaban cada vez más atrás y la presión de Flamengo llegaba casi por inercia. A los 39' aparecían los fantasmas ya que Adriano marcaba de cabeza el descuento, y se ponía aún más difícil siete minutos después cuando por doble amonestación Manuel Iturra veía la roja.
En la segunda etapa, con 10 jugadores se esperaba que Universidad de Chile se refugiará en su propio campo e intentará aguantar la ventaja exigua que tenía, pero no fue así y a los 2' de iniciado el complemento un pase de Montillo encontró en buena posición a José Rojas quién con un buen centro habilitó a Fernández que solo tuvo que empujarla, en ese momento el Maracaná era un cementerio, mientras los pocos hinchas azules que estaban en las gradas se hacían escuchar cada vez más fuertes.
Con ese gol Flamengo se apagó, fue una durísima estocada y la segunda etapa fue más tranquila que la primera, sin perder en emoción. El equipo rubronegro intentaba por todos los medios entrarle a la U pero el equipo azul estaba muy bien cerrado en retaguardia y gozaba de una gran actuación de su 2 centrales, Victorino y Olarra.
Los chilenos tuvieron un par de llegadas más al final con Rivarola y "shaggy" pero no puedieron finiquitar, algo que si logró Juan a los 89' con un furibundo remate desde fuera del área que se encontró con una débil respuesta de Miguel Pinto, además de la ayuda de un rebote y del césped mojado, fue el 2-3 que le dio un poco más de esperanza a los brasileños de cara a la revancha, de todas formas no opaca para nada lo logrado por los azules.
Nada está dicho, faltan 90' y el equipo de Pelusso debe tenerlo claro para no sufrir como con Alianza Lima, por su parte el "Fla" va a viajar con toda la fe de poder dar vuelta el marcador y firmar su paso a las semis.
La "U" cuajó quizás su mejor partido en mucho tiempo, un ritmo que poco se ve en el fútbol chileno y con actuaciones individuales extraordinarias. Por donde se mire lo de ayer fue impresionante y por algo todos los aplauden, incluso los mismos brasileños.
La familia azul está de fiesta, lo de ayer fue histórico y merece quedar en la retina de todos los amantes de la camiseta azul.
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